En la provincia de El Oro se puso en marcha un programa de mejoramiento genético bovino con miras a reactivar a la actividad ganadera, volviéndola más competitiva y rentable.
Esta iniciativa piloto busca elevar la calidad de la carne e incrementar la producción de leche a través de la inseminación artificial y posterior reproducción de bovinos de las mejores razas del mundo.
Para esto, la Prefectura de El Oro inició la entrega de 1500 pajuelas (semen de toro) que contienen material de alto valor genético. El objetivo a corto plazo, según el prefecto Clemente Bravo, es preñar a unas mil vacas en los próximos 3 meses.
Pequeños productores ganaderos de Zaruma, Piñas, Las Lajas, Marcabelí, Santa Rosa y otros cantones, fueron los primeros en recibir el kit de apoyo, que además contiene tratamientos hormonales, vitaminas y desparasitantes.
Esta sería la primera etapa del proyecto. El prefecto anunció que, según los resultados y la acogida del programa piloto, el gobierno provincial ejecutaría una segunda fase. El objetivo es que una mayor cantidad de pequeños productores puedan acceder a este incentivo.
La iniciativa comprende un proceso de identificación, seguimiento y evaluación técnica. La idea es que los productores que van a ser parte del programa, posean animales aptos para la inseminación artificial.
Contexto
Aunque el mejoramiento genético bovino no es algo nuevo en Ecuador, en la provincia de El Oro se había convertido una materia pendiente.
Según Iván Ludeña, ganadero y catedrático de la Universidad Técnica de Machala, esta iniciativa era una necesidad, dado que a los pequeños productores se les dificulta acceder a genética de animales superiores por su alto costo.
Criterios
Hay optimismo entre los beneficiarios del programa. Franklin Enríquez, ganadero de Las Lajas, cree que el promedio de leche por vaca podría pasar de 6 a 10 o 12 litros diarios. Esto supondría un incremento considerable en sus ganancias.
Para Osmani Armijos, presidente del centro agrícola de Zaruma, la expectativa a futuro es incrementar la productividad de manera gradual y ponerse a la par del sector ganadero de la sierra ecuatoriana.
“La idea también es que luego de este incentivo, nosotros nos motivemos y sigamos con el proceso de inseminación artificial de manera particular, importando el semen de los mejores toros del mundo”, agregó.