Clemente Bravo estrena estadio de césped natural e iluminación en Barbones

La espera de los apasionados por el fútbol llegó a su fin la noche del pasado sábado en Barbones, con la tan esperada inauguración del nuevo estadio construido por la Prefectura de El Oro.

Las modernas instalaciones deportivas reanudarán los campeonatos de fútbol que tradicionalmente se celebraban los fines de semana en esa localidad rural del cantón El Guabo.

Clemente Bravo, prefecto de El Oro, inauguró el escenario deportivo en compañía del alcalde de El Guabo, Hitler Álvarez y del presidente de la junta parroquial de Barbones, Juan Pablo Suscal.

La autoridad orense asegura que obras como estas se constituyen en un pilar para alejar a los jóvenes de las esquinas y de los malos hábitos, incentivándolos a practicar actividades que fomentan la sana competencia y una vida saludable.

En el terreno donde se edificó el estadio, los barboneños poseían una cancha de tierra que, según ellos, se convertía en una “piscina de camaronera” cuando llovía con intensidad. Eso los obligaba a paralizar los torneos hasta por seis meses.

“Llegaba el invierno y la cancha se transformaba en una gigantesca poza. Teníamos que esperar demasiado tiempo para que se pueda volver a jugar”, manifestó el presidente del GAD Parroquial.

Por su parte, Patricio Lucero, Presidente de la Liga Cantonal de El Guabo, indicó que al ser Barbones un semillero de deportistas esta obra les beneficia de gran manera, "Para nosotros es importante que este tipo de obras se den en El Guabo, donde hay gran cantidad de jóvenes que se están formando en diferentes disciplinas deportivas".

Así mismo, José Zambrano, jugador de la selección de fútbol de Barbones aseguró que el escenario reúne las condiciones adecuadas para los futbolistas de la localidad, "Ver esta cancha y pisar el césped me enorgullece; como nativo de Barbones, aspiramos a tener equipos de segunda categoría disputando un partido aquí, en esta obra que hoy nos entrega prefectura".

Actualmente, el estadio cuenta con una cancha de césped natural de 50 x 90, drenajes para evacuar las aguas lluvias, cerramiento metálico para proporcionar seguridad a los deportistas y espectadores, graderíos cubiertos para proteger del sol y la lluvia a los aficionados, camerinos, bancos de suplentes, baterías sanitarias e iluminación LED. Esto último permite disputar los partidos en horario nocturno.