La posible llegada del fenómeno de El Niño en la segunda mitad de 2023 activó las alarmas y motivó a la Prefectura de El Oro a reforzar las medidas de prevención para contrarrestar los probables efectos negativos de este evento de origen climático.
La Organización Meteorológica Mundial alertó que, a partir de julio, puede desencadenarse con fuerza este fenómeno, causando temperaturas más altas, precipitaciones y sequías.
Esta advertencia preocupa al prefecto Clemente Bravo, quien dispuso que se redoblen los trabajos de mitigación en zonas de alto riesgo de inundaciones y deslaves.
Una de las medidas es la limpieza y desazolve de los canales drenaje para facilitar la descarga de aguas lluvias y de riego, evitando la acumulación de líquido en plantaciones.
Los drenajes con sedimento, maleza y desperdicios son propensos a desbordamientos en época de lluvias y pueden provocar inundaciones y destrucción de cultivos, generando cuantiosas pérdidas para el sector agrícola de la provincia.
“Generalmente a esta altura del año ya estamos trabajando en prevención, con miras a la etapa invernal, pero esta vez, el tiempo apremia por la eventual llegada del fenómeno de El Niño y debemos acelerar todo. Tenemos bajo nuestra responsabilidad 900 km de canales, entre riego y drenaje”, dijo la autoridad provincial.
El encauzamiento de ríos y la protección de muros con escollera son otras de las labores que se ejecutan. Según el prefecto, se han identificado zonas críticas en varios afluentes y se las está atendiendo para evitar que la fuerza de las crecientes cause daños en áreas pobladas y productivas.
Para reducir los deslaves y el colapso de vías, el Gobierno Provincial trabaja en la estabilización de taludes, construcción de terrazas, colocación de tuberías y pasos de agua de mayor capacidad en zonas donde las lluvias han causado efectos devastadores años anteriores.
El prefecto recordó que en su administración se instalaron 16 puentes Bailey para conectar sitios y comunidades productivas que tradicionalmente quedaban incomunicadas en cada temporal.
Uno de los efectos del fenómeno de El Niño es la sequía. La Prefectura ha construido 40 pozos profundos en la provincia para garantizar que los productores puedan regar sus sembríos incluso en época de estiaje. “No estamos improvisando, el trabajo se ha ejecutado desde hace tiempo atrás y ahora lo estamos reforzando”, destacó.
Comments